Ir al contenido principal

Maternidad, embarazo y miedo.

En mi departamento hay una compañera embarazada. Me lo contó en plan super secreto sólo a mí porque soy su inmediata superior esta misma semana. Está de dos meses. Es su primer embarazo. Yo me alegré mucho por ella e incluso sentí cierta envidia. Sí, estoy premenstrual y las hormonas me juegan esas malas pasadas.

Yo no soy nada observadora. Más bien soy despistada en estas cosas. Pero desde hace unos días la notaba distinta, más alicaída, con menos ánimo. Lo entendí enseguida cuando me contó que ha tenido algunos problemillas físicos iniciales y es normal sentirse un poco plof. Pero ahora parece que las molestias están remitiendo y ella sigue agobiada.

Recuerdo en mi segundo embarazo, en el primero lo perdí tan rápido que no tuve tiempo a muchas sensaciones, que yo también andaba muy agobiada y asustada. Es un paso tan grande saber que vas a ser madre y que tu vida va a dar un giro radica, y eso que en ese punto una ni se imagina de verdad la magnitud del cambio, que recuerdo perfectamente que me sentía abrumada pero al fin y al cabo feliz.

El caso es que me tiene un poco preocupada. Ella me ha transmitido lo asustada que está. Yo le he intentado decir que ser madre es lo más bonito que le va a pasar nunca pero también he empatizado con ella porque yo pasé por lo mismo, y sé que no es fácil relajarse y dejarse llevar. Las preocupaciones existen desde el minuto cero, ese en el que te quedas pasmada ante el predictor con dos barritas rosas dibujadas. Y si como en mi caso has vivido ya un aborto espontáneo antes pues aún más. Pero es que el embarazo es un estado tan maravilloso que me da mucha pena que no lo disfrute plenamente. Porque yo que sé que no voy a vivirlo otra vez lo añoro mucho y me arrepiento de no haberlo disfrutado más.

Los que me seguís desde hace tiempo conocéis bien mis neuras del embarazo, el blog fue una vía de escape fantástica y además gracias a él pude encontrar a otras madres con las que pude intercambiar impresiones, dudas y preocupaciones.

Así que espero ser un punto de apoyo para ella, si así lo desea, para darle fuerza y ánimo, y también orientarla en la medida que me sea posible en los temas que ella quiera para mejorar su estado anímico en este embarazo que le ha pillado por sorpresa y le ha volcado demasiadas dudas y miedos en su plácida existencia.

Comentarios

Entradas populares de este blog

No pudo ser.

Breve post para contaros que se ha interrumpido involuntariamente mi deseado embarazo. Volveré cuando esté un poco mejor... Ahora no tengo palabras.

Despertar de nuevo...

Abro los ojos de nuevo al mundo, despierto de una especie de ensoñación o pesadilla más bien, donde el mundo, mi mundo, se estaba desmoronando. Miro hacia mi alrededor y todo sigue bien. Mi sobrino es un bebé sano y regordete que no necesita estar conectado a una máquina y puede salir a pasear cada día por la calle. Nadie lleva mascarilla. No ha habido una avalancha de muertes inesperadas. Puedo abrazar a mi amiga después de un día duro para darle ánimo y nadie me mirará con cara de reprobación. Puedo planificar mi próxima escapada a un concierto, o mi próximo viaje, y no necesitaré un PCR negativo. No hay toque de queda. Puedo ver salir el sol. Comer una hamburguesa en la calle está bien. Hacerlo en una terraza también. No conozco el concepto distancia social. Lo más hidroalcohólico que tengo es el último gin tonic que tomé el sábado pasado. No hay pandemia. Y no he cometido ningún estúpido error. No he visto la cara B de la vida y no quiero verla.  Pero desde mayo tengo una sonrisa 

Burning night.

Voy falta de sueño, bueno de sueño y de muchas otras cosas, y puede que eso nuble mi entendimiento, como la solteras nublan el entendimiento de Carlos Baute y lo dejan colgado no precisamente en sus manos cada tarde en esa cosa que se parece a un programa pero que la verdad no acabo de entender muy bien que es y que se llama ELÍGEME. ¿Pero Carlos Baute no prefería a los estibadores portuarios? Siempre lo había creído así pero viendo como desnuda con la mirada a las mocetonas que entran en su plató tengo una duda más que considerable al respecto. En fin a lo que íbamos que tengo la cabeza un poquito atolondrada (ufff esta palabra que acabo de usar era la favorita de la Hermana María, mi profe de mates de 8º EGB, así de repente me ha venido un flash de su imagen a la cabeza, no os digo que no estoy fina...) y puede que eso haga que ande un poco monotemática, pero tenéis que perdonarme, I'm happy, so happy, y no se me puede aguantar, I know. Y es que esta noche... VAMOS A QUEMAR MESTA